Aquí está el auténtico Fort Weebles, también exclusivo de España pues la patente es original de aquí a nombre de Carlos Dinnier, el propietario de la empresa Brekar. Más simple no puede ser: una vallitas unidas por una especie de piezas similares al tente, una puerta de entrada articulada y una torre de dos pisos, todo perfectamente desmontable para poderse guardar en poco espacio (las madres siempre lo agradecen). Lo que me parece más increíble es que conservo todas las piezas desde pequeño, no me falta ninguna y eso que han pasado unos 30 años y han jugado varios niños. Dentro del universo del Oeste formaba parte esencial pues en el se refugiaban multitud de Weebles y era parada obligatoria para el tren y la diligencia.
Se adjuntaba con 5 muñecos repetidos algunos de ellos, mostrados en otro artículo.
muy chulo el fuerte y conservarlo íntegro 30 años todo un gran mérito... !esperamos nuevas entradas y sobre todo fotos!
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