

Anteriormente habíamos visto a los animales del Zoo y ahora presentamos donde estaban alojados. El Zoo de los Weebles de Brekar no es demasiado grande pues se puede visitar en un rápido paseíto, pero ¿a qué niño no le ha gustado poseer un zoológico propio? A menudo las jaulas contenían a los visitantes mientras los animales se escapaban en el coche o en el tren despues de haberlos encerrado. Todavía lo conservo en unas condiciones aceptables a pesar de haber sufrido el uso de un sobrino que no lo trató demasiado bien. En Norteamérica no se fabricó y su origen procede del Zoo inglés de Airfix.